Al fin y al cabo, todos queremos lo mismo:
niños felices y sanos que se conviertan en adultos afectuosos y seguros de sí mismos.

Y con confianza ¡todo es posible!
De la cercanía surge la conexión
Por eso, Stokke desarrolla productos que están diseñados para acercarte a tu bebé. Mantener la cercanía con tu hijo crea una conexión, como cuando lo llevas a la mesa familiar o exploráis el mundo juntos: tienes contacto visual, interactúas y creas un vínculo. Le muestras a tus hijos que los ves, los escuchas y los entiendes. Esto le da a los niños la sensación de seguridad que necesitan para sentirse seguros, comprendidos y amados.

De la conexión surge la confianza
Cuando un niño está estrechamente conectado con sus padres, la seguridad que siente le permite salir de su zona de confort. Esto hace que los niños se rindan a su sentido natural de curiosidad, exploren y aprendan a través del juego, la experimentación y la libertad de movimiento. Un niño que recibe apoyo se siente seguro para intentar algo y fallar, "levantarse y volver a intentarlo", ya que sabe que estás ahí si te necesita. Intentar algo hasta tener éxito es la manera en que los niños crecen con confianza.

Y con confianza, todo es posible
La confianza es uno de los mejores regalos que un padre puede darle a su hijo. Un niño que crece teniendo fe en sus habilidades no tiene miedo y está listo para asumir los obstáculos de la vida. Se siente libre para seguir sus pasiones. Cree en sus sueños, grandes o pequeños, y tiene el coraje de seguirlos, a pesar de lo que otros puedan pensar.
